"Así que hemos dejado de evaluar a otros desde el punto de vista humano. En un tiempo, pensábamos de Cristo solo desde un punto de vista humano. ¡Qué tan diferente lo conocemos ahora!" 2 Corintios 5:16 NTV
Hace poco más de 20 años conocí una persona que aseguraba fehacientemente que la gente nunca cambia, a lo que obviamente yo le aseguré, con la misma firmeza y desde lo más profundo de mi formación cristiana(religiosa y legalista), que todo cambio era posible con la presencia de Dios en nuestra vida.
Hoy, más de 20 años después, sigo recordando esa plática y pienso en qué buen ojo tuvo esa persona para evaluar y presagiar el comportamiento que tendría en los años posteriores a ese día.
Si bien las señas particulares de ciertas deficiencias de carácter que yo mostraba en esos años pudieron orientarla, es evidente que lo que hizo fue crear un prejuicio de mi a través de la observación de mi conducta, mis comentarios y mi predisposición a determinadas personas, preferencias y creencias religiosas.
Por mi parte, yo hice exactamente lo mismo, me hice una imagen de esta persona y me empeñé en demostrar que los cambios verdaderos sí existen y son tangibles. Cosa que después de varios años preferí dejar por la paz y auto convencerme (incorrectamente) de que, lo que sucedía en realidad, era que aprendíamos a mantenernos al margen, en un estado de auto control y que, en ocasiones, cuando la presión se acumulaba demasiado era “conveniente” dejarla salir, sin importar el costo que esto tuviera.
¿Qué pasa cuando Dios ha comenzado en ti una nueva obra?
Si tu eres de los que ha decidido seguir un camino con Dios y lo has invitado a tu vida, ¿Qué ha cambiado realmente? ¿Te sentiste diferente? Quizás lo más que ha pasado es que te sentiste con nuevos bríos y con ganas de platicarle a todo el mundo lo que te pasó; ¿y si lo cuentas? ¿y si te ven como loco? ¿y si se burlan de ti y comienzan a rechazarte? No, verdad... Mejor lo escondes y te lo guardas hasta que sea el momento más oportuno, no?
Bueno, pues déjame decirte que estás haciendo un prejuicio de los demás, no tienes idea si los demás están aún más necesitados de Dios que tú, si necesitan escuchar tu testimonio o si te necesitan para que juntos puedan crecer y madurar en su relación con Dios.
Ahora imagina que tú ya tienes años de "cristiano" y llega alguien nuevo a la iglesia con todos los defectos, problemas y necesidades que te puedas imaginar - y que por cierto son los mismos que tu tenías antes - , ¿que haces? ¿lo aceptas? ¿lo invitas a sentarse contigo en tu grupo, te interesa siquiera conocerlo? O solo le aplaudes por haberse puesto de pie y mostrarse ante todos como el nuevo agremiado de la congregación.
¿Te suena la frase "para Dios todos somos iguales"?
¿Esto significa que somos iguales solo en las cosas buenas o también en las malas? No hagas prejuicios, Dios nos ve igual a todos y eso significa que ve en cada uno de nosotros el potencial para cambiar simplemente porque El nos ha amado desde el inicio y quiere darnos a todos una nueva personalidad y un nuevo carácter; y es hasta que nos rendimos ante El verdaderamente, que los cambios son tangibles y visibles.
Lo mismo pasaba respecto de nuestra forma de ver a Dios, antes teníamos un pensamiento muy distinto acerca de El, pero ahora, que comienzas a conocerlo de una manera personal e individual ¿no te parece distinto? Es como escribió Pablo a la iglesia en Corintio: "A partir de ahora, ya no vamos a valorar a los demás desde el punto de vista humano. Y aunque antes valorábamos a Cristo de esa manera, ya no seguiremos valorándolo así. Ahora que estamos unidos a Cristo, somos una nueva creación. Dios ya no tiene en cuenta nuestra antigua manera de vivir, sino que nos ha hecho comenzar una vida nueva." 2 Corintios 5:16-18 TLA
Piensa en esto:
¿Crees que las personas sí pueden cambiar?
¿Estarías dispuesto a pasar más tiempo con personas totalmente diferentes a ti, aun cuando esto no concuerde con tu credo?
Recuerda que el cristianismo más efectivo es el que opera fuera del contexto y protección de (las instalaciones de) la iglesia.
Todos podemos cambiar.
Si te has sentido aislado, rechazado, has sido objeto de #bullying, te han dicho #nerd o #friki por ser "diferente" a los demás, esta serie de retorno online es para ti. Podemos amar a los demás como Dios nos ama, pero todo comienza aceptando quién eres y enfocando sabiamente tu personalidad. Dios ama la diversidad y #estabienserdiferente
Hablaremos de cómo lidiar con la #bajaautoestima los #excesos la #sobreporteccion #promiscuidad #obsesion #violenciapasiva #represion entre otros temas.